Cheesecake con dulce de leche y mermelada de albaricoque

Muy cremosa

30 minutos    8 raciones       Fácil

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Posiblemente esta sea una de las mejores tartas de queso que he probado en mi vida y no es porque sea de Pijiteces, que también sino porque su sabor, su textura y su olor son inconfundibles 😍

Además es súper fácil de hacer, lleva pocos ingredientes y no necesitas horno para hacerla 👌

En particular, la mermelada de albaricoque que es la que he elegido como topping para tapar la superficie le da una finura a la tarta buenísima 👇

Ingredientes

• 500 gr de queso crema tipo San Millán
• Una cucharadita de esencia de vainilla
• 150 gr de nata para montar
• 120 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• 8 cucharaditas de azúcar
• 120 gr de galletas
• 40 gr de dulce de leche
• Molde desmontable de 18 cm de diámetro
• Mermelada de albaricoque para cubrir la tarta

Preparación de Cheesecake con dulce de leche y mermelada de albaricoque

1. Con una batidora trituradora molemos las galletas. Si no tienes un procesador de alimentos, también puedes hacerlo metiéndolas en una bolsa de plástico para congelar y golpeándolas con un rodillo de cocina o con una cuchara. Reservamos la mezcla en un bol hondo.
2. A continuación derretimos 70 gr de mantequilla en el microondas a temperatura media, 1 min o en un cazo hasta que se derrita. Seguidamente, incorporamos la mantequilla a las galletas trituradas y lo mezclamos muy bien. Después, ponemos la masa de galletas en el molde cerrado y las esparcimos con una cuchara hasta que se quede toda la base cubierta y compacta.
3. El siguiente paso consiste en añadir a un bol hondo la nata y el azúcar y montarla con una batidora de varillas hasta que quede un poco dura pero sin pasarnos o se nos convertirá en mantequilla. Seguidamente le añadimos el queso crema, el dulce de leche y 50 gr de mantequilla. Si la mantequilla sigue un poco dura, puedes meterla al microondas a temperatura media durante 20 segundos. Batimos muy bien toda la mezcla con la batidora de varillas y la añadimos al molde desmontable.
4. A continuación con una cuchara vamos aplanando toda la superficie hasta que toda la masa quede a la misma altura. Metemos al frigorífico y la dejamos reposar ahí hasta el día siguiente. También puedes comerla el mismo día pasadas unas 6 horas pero esta tarta está rica de un día para otro.
5. Antes de servirla, cubrimos toda la superficie con una fina capa de mermelada de albaricoque. Está espectacular de buena.

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